Abre mis ojos Señor.
Dios te bendiga a ti que me acompañas en esta hora, seas bienvenido a discípulos de Cristo, deseo de corazón este mensaje sea de edificación para tu vida.
Reflexionando un poco en estos tiempos de crisis en que buscamos una solución para salir adelante, me doy cuenta, de como nuestros sentidos pueden ser confundidos con tanta información, que sinceramente nos ha provocado dudas y miedos que al final desvían nuestra mirada y atención a Dios, el único que tiene poder para liberarnos y salvar nuestra alma en estos tiempos difíciles