De mal en Peor?

De manera semejante a un árbol que produce mal fruto, así es la vida de muchos en estos tiempos, pero pocos se detienen a observar el porque y algunos que logran ver la problemática, buscan según su propia experiencia o compresión intentar resolver el problema. A tu opinión, ¿Un árbol enfermo puede curarse o debe talarse?

A diferencia nuestra, tenemos conciencia para discernir entre lo bueno y lo malo, sin embargo parece que vamos por el camino fácil y destructivo, ¿ No lo crees ?

Intentan forzar a los niños a cambiar su sexo, confundiendolos con falsas y destructivas enseñanzas, la pobreza de millones, es el negocio de pocos, el hambre de millones aumenta, mientras muchos desperdician la comida, guerras sin sentido, países «desarrollados» que permiten la necrofilia, zoofilia, y tanta atrocidad, la ciencia intenta transhumanizarnos, la falsa moral acomodada a gustos propios crea leyes inmorales para forzar a muchos a llamar a lo malo bueno. Un listado extenso de como crece la maldad, pero pocos están dispuestos a hacer lo bueno.

¿Que está ocurriendo?

Todos somos culpables en cierta medida, nuestra liviandad hacia rechazar lo injusto y hacer lo justo, nos arrastra junto a quienes están cerca, volviendo todo una reacción en cadena.

Una causa muy influyente en estos días es el ateismo que de manera sutil se ha filtrado en la política global, afectando a la sociedad y a la familia como consecuencia de introducir toda una influencia de «modernismo» escondido en un pensamiento que asevera: Dios no es necesario, no existe… esta declaración claramente necesaria para justificar las atrocidades que ahora se disfrazan de «libertad» la inmoralidad enmascarada en muchas formas, hasta en un arcoiris que pretende brillar y aparentar ser hermoso como el verdadero, pero que en realidad solo tiene oscuridad.

Salmos 53:1-4 RVR1960

Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, e hicieron abominable maldad; No hay quien haga bien. Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido Que buscara a Dios. Cada uno se había vuelto atrás; todos se habían corrompido.

Según el texto, cómo consecuencia de la necedad de negar a Dios, el corazón y la mente se corrompen provocando las abominaciones que aumentan con cada generación y que hunden más a humanidad en un fango de inmoralidad.

Pensemos por esto: ¿Somos justos o injustos, alguien podrá librarnos de esta maldad?

1ra de Juan 3

7 Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo. 8 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. 9 Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él.

Resta reflexionar a profundidad sobre nuestra vida, si estamos viviendo del lado del mal, necesitamos de Cristo para que nos libre y si estamos viviendo verdaderamente del lado de Dios, necesitamos a Cristo para mantenernos firmes y que nuestras obras siempre sean justas delante de sus ojos y de nuestro prójimo.

Anhelemos en todo, ser un árbol sano y lleno de la presencia de Dios para dar buen fruto, porque un árbol muerto con mal frutos, corre riesgo de ser cortado y hechado al fuego. Busquemos a Jesús y sus virtudes crecerán en nosotros brindándonos esperanza, libertad y vida.

Reflexionemos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *